Reírse de uno mismo

Siempre hay un momento en la vida, en el que te das cuenta de que te has equivocado a la hora de hacer o pensar algo. Y, en parte, te arrepientes de ello. Pero no, eso no es lo que debes hacer, si pensaste o hiciste eso es porque tenías que hacerlo y punto; sin más complicaciones. No tienes que derrumbarte por pensar que alguien era distinto, y de repente te has llevado un chasco, y sí, del día a la mañana una persona puede cambiar , déjala que lo haga, si así se siente mejor, o al menos eso dice.

Nunca debes dejarte llevar por lo que te digan, solo tú puedes juzgar tus propias situaciones, porque cada situación es diferente, ninguna es igual, siempre hay algo que cambia, como pueden ser las personas. Pero tienes que vivirlo, porque cada día es importante  y debes vivirlo como si fuera el último, con sus pros y sus contras.

Tarde o temprano, tenemos que aprender a reírnos de todo, porque la vida no está para vivirla amargada, está para vivirla llena de emociones y pasarlo lo mejor que puedas.Incluso, hay que aprender a reírse de uno mismo; que mejor risoterapia que aprender a reírse de uno mismo, esto ayuda a vivir la vida sin preocupaciones, es decir, HAKUNA MATATA.

Sonríe, pese a tener un motivo por el que llorar,

llorar es fácil, pero a mí me gustan los retos

y aprender a ganar.